Estimado Chelis:No puedo olvidar el dolor de aquel 27 de mayo de 2006 cuando Querétaro sepultó las esperanzas de regresar al máximo circuito. Ese 3-0 en contra dejó a toda la afición poblana con la incertidumbre de qué iba a pasar con su querido equipo ya que Emilio Maurer había declarado que si fracasaba en busca del ascenso el equipo podría desaparecer.
Dos días después agarraste a este equipo y sin experiencia alguna en el fútbol profesional te propusiste ascenderlo. Comenzaste tu trabajo basándote en los jóvenes que por tantos años dirigiste y le regresaste al equipo una identidad que habia retomado parcialmente en el periodo del Mortero Aravena durante la primera temporada en Primera A.
Y fue así cuando los nombres de los jóvenes Luis Noriega, Sergio Rosas, Jorge Villalpando, Juan Carlos García y Sergio Pérez comenzaron a ser conocidos para el aficionado al Puebla. A estos hombres tuviste el acierto de sumar y mantener a otros de experiencia que se convirtieron en nuestros nuevos ídolos: Álvaro "bola" González, Jorge Damián "Ruso" Zamogilny, Híber Ruiz, Hugo Ruiz, Marco Parra, Joaquín Velázquez, Ricardo Jiménez...
Cómo olvidar aquel domingo de diciembre de 2006 cuando el Ruso anotó ese penal ante Salamanca que nos dió una nueva esperanza y mucho menos olvidar aquel 26 de mayo de 2007. cuando 50 mil personas atestiguamos el triunfo más grande del Puebla en 16 años: El retorno a primera división. El silbatazo final de Armando Archundia arrancó lágrimas a más de uno (yo incluído por supuesto).
El año en primera división fue inolvidable, sobre todo el torneo de Clausura donde nos arrancamos los cabellos del sufrimiento. Ese llanto que soltaste tras el empate ante Santos lo compartimos varios de nosotros y ni qué decir de las emociones que vivimos después del triunfo en Veracruz tras esa tormentosa semana en la que fuiste despedido y reinstalado después de perder frente al Toluca.
Tu principal virtud fue el convertir a la Franja en un equipo que no daba por perdida una pelota, un equipo al que no le importaba romperse las uñas con tal de sacar un resultado, un equipo que jugó con el cuchillo entre los dientes en busca de su objetivo... Esa virtud hizo olvidar tanto tus aciertos como tus errores tácticos y esa misma virtud fue la que llevó a este grupo de jugadores a cumplir con un objetivo.
La mayor parte de la gente que dice irle al Puebla es repugnante, es gente que va al estadio y apoya cuando el equipo gana, pero cuando pierde abuchea, critica y se esconde. A esa gente la pusiste en su lugar y correctamente dijiste que tienen al equipo que se merecen. Pocos tienen los pantalones para decirlo, y tu lo hiciste.
Hiciste bien Chelis. El regresarle la identidad al equipo, regresó a la gente a las tribunas como en los viejos tiempos, por que hasta los villamelones (contados por miles en esta ciudad) supieron por una vez en su vida lo que es irle a un equipo de corazón. Hiciste bien por que los jóvenes pudimos ver aunque fuera por solo dos temporadas al temible equipo de los 70's y 80's, ese equipo del que nuestros padres y familiares mayores tanto nos platicaron.
Hoy te vas, y es triste que un figurón como tu se vaya por la puerta de atrás, ni modo así es el fútbol. Es triste que tu último contacto con la gente que tanto te quizo fuera un sonoro abucheo tras el empate ante Jaguares. Hiciste cosas buenas y malas, sin embargo, como aficionado al futbol me quedo indudablemente con todo lo bueno que hiciste por el equipo de mis amores.
Estoy seguro que como yo, los cientos (nunca miles) de aficionados que te acompañamos en la totalidad de tu periodo al frente del Puebla se quedarán con todo lo bueno y más seguro estoy de que tarde o temprano regresarás con más experiencia y nuevas armas para llevar a este equipo a las alturas que perdió hace mucho tiempo.
Siempre has sido apasionado, lo fuiste a lo largo de los dos años y meses que estuviste al frente del Puebla y siempre te caracterizaste por ser un técnico diferente. Eres como todos los que quisiéramos estar algún día en ese lugar que ocupaste, como te lo dije alguna vez: "eres el sueño de miles de aficionados a la Franja, un aficionado que pasa a ser entrenador del equipo de sus amores."
¡Gracias Chelis!
Dos días después agarraste a este equipo y sin experiencia alguna en el fútbol profesional te propusiste ascenderlo. Comenzaste tu trabajo basándote en los jóvenes que por tantos años dirigiste y le regresaste al equipo una identidad que habia retomado parcialmente en el periodo del Mortero Aravena durante la primera temporada en Primera A.
Y fue así cuando los nombres de los jóvenes Luis Noriega, Sergio Rosas, Jorge Villalpando, Juan Carlos García y Sergio Pérez comenzaron a ser conocidos para el aficionado al Puebla. A estos hombres tuviste el acierto de sumar y mantener a otros de experiencia que se convirtieron en nuestros nuevos ídolos: Álvaro "bola" González, Jorge Damián "Ruso" Zamogilny, Híber Ruiz, Hugo Ruiz, Marco Parra, Joaquín Velázquez, Ricardo Jiménez...
Cómo olvidar aquel domingo de diciembre de 2006 cuando el Ruso anotó ese penal ante Salamanca que nos dió una nueva esperanza y mucho menos olvidar aquel 26 de mayo de 2007. cuando 50 mil personas atestiguamos el triunfo más grande del Puebla en 16 años: El retorno a primera división. El silbatazo final de Armando Archundia arrancó lágrimas a más de uno (yo incluído por supuesto).
El año en primera división fue inolvidable, sobre todo el torneo de Clausura donde nos arrancamos los cabellos del sufrimiento. Ese llanto que soltaste tras el empate ante Santos lo compartimos varios de nosotros y ni qué decir de las emociones que vivimos después del triunfo en Veracruz tras esa tormentosa semana en la que fuiste despedido y reinstalado después de perder frente al Toluca.
Tu principal virtud fue el convertir a la Franja en un equipo que no daba por perdida una pelota, un equipo al que no le importaba romperse las uñas con tal de sacar un resultado, un equipo que jugó con el cuchillo entre los dientes en busca de su objetivo... Esa virtud hizo olvidar tanto tus aciertos como tus errores tácticos y esa misma virtud fue la que llevó a este grupo de jugadores a cumplir con un objetivo.
La mayor parte de la gente que dice irle al Puebla es repugnante, es gente que va al estadio y apoya cuando el equipo gana, pero cuando pierde abuchea, critica y se esconde. A esa gente la pusiste en su lugar y correctamente dijiste que tienen al equipo que se merecen. Pocos tienen los pantalones para decirlo, y tu lo hiciste.
Hiciste bien Chelis. El regresarle la identidad al equipo, regresó a la gente a las tribunas como en los viejos tiempos, por que hasta los villamelones (contados por miles en esta ciudad) supieron por una vez en su vida lo que es irle a un equipo de corazón. Hiciste bien por que los jóvenes pudimos ver aunque fuera por solo dos temporadas al temible equipo de los 70's y 80's, ese equipo del que nuestros padres y familiares mayores tanto nos platicaron.
Hoy te vas, y es triste que un figurón como tu se vaya por la puerta de atrás, ni modo así es el fútbol. Es triste que tu último contacto con la gente que tanto te quizo fuera un sonoro abucheo tras el empate ante Jaguares. Hiciste cosas buenas y malas, sin embargo, como aficionado al futbol me quedo indudablemente con todo lo bueno que hiciste por el equipo de mis amores.
Estoy seguro que como yo, los cientos (nunca miles) de aficionados que te acompañamos en la totalidad de tu periodo al frente del Puebla se quedarán con todo lo bueno y más seguro estoy de que tarde o temprano regresarás con más experiencia y nuevas armas para llevar a este equipo a las alturas que perdió hace mucho tiempo.
Siempre has sido apasionado, lo fuiste a lo largo de los dos años y meses que estuviste al frente del Puebla y siempre te caracterizaste por ser un técnico diferente. Eres como todos los que quisiéramos estar algún día en ese lugar que ocupaste, como te lo dije alguna vez: "eres el sueño de miles de aficionados a la Franja, un aficionado que pasa a ser entrenador del equipo de sus amores."
¡Gracias Chelis!
2 comentarios:
la salida de Chelis ya era solamente cuestión de tiempo, la entrada en el estadio es cada vez menor y no creo que sea por el factor villamelón... el torneo pasado los resultados tampoco eran buenos y aún así el Cuauhtemoc se llenaba. Claro, no es lo mismo que pierda un equipo con ganas, con entrega y con toda la afición conectada anímicamente que ir a ver perder a un equipo sin identidad y que está lejos de la cohesión que habían alcanzado.
Chelís dejó muchas, muchas cosas buenas. Esperemos que retomen lo rescatable y podamos tener a La Franja que da gusto ver jugar!!!
Estoy de acuerdo que si ahora el estadio no se llena no es por el factor villamelón, comprendo que hay otros factores que influyen como el aumento de los precios de las entradas y ps también lo poco que animó el armado del equipo en este torneo y la falta de entrega del equipo. Gracias por el comentario
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