El fin justifica los medios y el club América aplicó como pocas veces esta frase durante el partido de vuelta de la copa sudamericana donde cayeron milagrosamente úncamente por 0-1 ante el conjunto brasileño Vasco da Gama y que sirvió para que el equipo mexicano avanzara a las semifinales del torneo por primera vez en su historia con global de 2-1.
Sabedores de que llegaban a Río de Janeiro con una ventaja de 2 goles, América planteó un partido inteligente, con tres stoppers como Villa, Argüello y Silva y su ya clásica línea de 4 con Davino, Rojas, Castro y Oscar Rojas. Sin embargo la defensa americanista fue una caricatura y de no haber sido por Memo Ochoa y por dos providenciales apariciones de Oscar Rojas para salvar en la línea el gol en contra el conjunto brasileño hubiera ganado por un marcador escandaloso.
Ofensivamente América no existió. Salvo por un mano a mano que falló Salvador Cabañas y un par de tímidas llegadas vía Lucas Castromán, el medio campo americanista se vio ampliamente superado por los brasileños que asediaron la portería de Ochoa y practicaron tiro al blanco durante todo el primer tiempo y buena parte del segundo. Al final, la figura de Ochoa se agigantó y evitó que los brasileños lograran cuando menos el empate en el global.
Daniel Brailovsky debe estar preocupado. Tanto en los juegos contra Veracruz y Pachuca su equipo ha acudido a la suerte para sacar los resultados, la defensa se ha visto muy mal y Chivas no es lo mismo que Pachuca o Veracruz. Ahora el América piensa en las Chivas Rayadas de Guadalajara a quienes enfrentará el próximo domingo y curiosamente podría ser su rival en la ronda de semifinales de la copa.
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