Pocos regresos me dan tanto gusto como el de David Nalbandian que el domingo pasado confirmó su regreso a la élite del tenis mundial con su triunfo de 3-6; 6-3 y 6-3 sobre el mejor jugador del mundo Roger Federer en la final del Torneo Master Series de Madrid. Y me da gusto no por que le haya ganado a mi jugador favorito del actual circuito, sino por que Nalbandian es un gran jugador y es uno de los pocos jugadores en el mundo que son capaces de hacer sufrir al maestro de Basilea en superficies rápidas.
Tras un primer set muy titubeante, el argentino ajustó su juego, se quitó el nerviosismo y empezó a jugar de estupenda manera. Un juego agresivo que impidió a Federer meterse en el partido, además de que Roger falló muchos primeros servicios que permitieron a Nalbandian romperle el saque en tres ocasiones y no permitir que Federer le rompiera su saque, suficientes para llevarse los últimos dos parciales y el campeonato.
Pocos son los jugadores que pueden presumir de haberle ganado dos finales de Masters Series en cancha dura o de pasto y Nalbandián lo hizo ya, hay que recordar que la primera final que perdió el Suizo en su carrera fue precisamente contra Nalbandián en el Masters Cup Shanghai en 2005 cuando el argentino lo derrotó en 5 sets en un partido extraordinario.
Al parecer el "Rey David" como lo llaman en su tierra está de regreso tras un año lleno de lesiones que le impidieron al argentino estar en los primeros planos. Con el nivel que demostró la semana pasada en la que derrotó consecutivamente a Rafael Nadal, Novak Djokovic y Roger Federer, Nalbandián no tardará en regresar a ocupar el lugar que le pertenece dentro de los 10 mejores del circuito ATP y peleará por su primer título de Grand Slam el próximo año. Enhorabuena David.
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